domingo, 22 de marzo de 2020

BIOGRAFIA: OSCAR HERNANDEZ


Oscar Hernandez (Manhattan, New York; 22 de marzo de 1954) es músico puertorriqueño, arreglista musical y productor, principalmente del género salsa.


La familia de Oscar Hernandez había emigrado de Puerto Rico a los Estados Unidos en la década de 1940, en el ghetto del sur del Bronx densamente poblada por latinos en Nueva York.

Asistió a los clubes donde tocaban Ray Barretto, Eddie Palmieri y Richie Ray. Después de la trágica muerte de un hermano de una sobredosis de drogas, abandonó el ghetto. En 1966, empezó a tocar trompeta. Dos años después de que alguien le dio a su hermano un piano y aprendió a tocarlo.

Oscar Hernandez comenzó a tocar en algunas bandas locales. En 1972, tocó con Ismael Miranda y luego con Ray Barretto y los músicos de jazz Charlie Parker y Dizzy Gillespie. Después de seis años con Barretto, se unió al grupo de Rubén Blades.

Hernandez ingresó a la Universidad de la Ciudad de Nueva York, donde obtuvo una Licenciatura en música. Hernandez ha tocado con Tito Puente, Celia Cruz, Julio Iglesias, Juan Luis Guerra, Willie Colón, Oscar D'Leon ... También produjo discos para Rubén Blades, Willie Colon, Daniel Ponce, Rafael Dejesus, Eddie Torres y Phil Hernández.

Hernandez fundó y dirigió la Spanish Harlem Orchestra después de conocer a Erin Levinson, un productor de música bajo contrato con Warner Bros. La banda recibió un Grammy en 2002 por "Mejor Álbum de Salsa", un premio Billboard en 2003 por "Álbum de Salsa del Año" en 2005 y un Grammy por "Mejor Álbum de Salsa".
Sus mentores en los arreglos y composición fueron José Febles, Marty Sheller, Luis Cruz y Louie Ramírez. El maestro Oscar Hernández, es uno de los más grandes exponentes de nuestra música enmarcada en la salsa y el Latin Jazz en las últimas cuatro décadas.

Sus primeras grabaciones las realizó con las orquestas La Conquistadora, Joey Pastrana e Ismael Miranda, en los años 1972 y 1973; su piano empezó a escucharse en temas como: “Mami Me Gustó”, “Corazón”, “Candela”, “Óyela”, “Amor Verdadero”, “Así Se Compone Un Son”, “Mulence”, “Me Voy Pa Colombia” y “Cuídate Bien”.

Su legado musical fue aumentando gracias a sus participaciones con Roberto Torres y Chocolate, Pete “Conde” Rodríguez, Pupi y Su Charanga, Grupo Folklórico y Experimental Nuevayorquino, Conjunto Libre, Manny Oquendo, Ray Barreto, Kako y Azuquita, Los Kimbos, Celia Cruz y Johnny Pacheco, en la década de los setenta. Su caudalosa carrera musical continuó en los años ochenta grabando con Dave Valentín, Adalberto Santiago, Típica 73, Carlos Santos, Johnny Rodríguez y Su Orquesta, Rubén Blades y Seis del Solar, Luis “Perico” Ortiz, Camilo Azuquita y Rafael de Jesús, entre otros.

En la década de los noventa su vertiginosa carrera continuó con orquestas, músicos y cantantes como: Orlando Watussi, Daniel Ponce, Louie Ramírez, Son Del Solar, Seis Del Solar, Santiago Cerón, Bobby Sanabria, Tito Rodríguez Jr, Willie Colón, Mongo Santamaría, Jimmy Bosch y Ricardo Lemvo, para nombrar algunos.

En el año 2001 el maestro Oscar Hernández creó un proyecto musical titulado “Spanish Harlem Orchestra”, con la cual ha grabado cinco producciones musicales: “Un Gran Día en el Barrio”, en 2002; “Across 110th Street”, en 2004; “United We Swing”, en 2007; “Viva la Tradición”, en 2010 y su quinto trabajo musical se tituló “Spanish Harlem Orchestra”, del año 2014. Los álbumes contaron con la producción, los arreglos y el piano del maestro Óscar Hernández. Cuatro de ellos fueron nominados al premio Grammy, y la Orquesta obtuvo el preciado galardón con dos de ellos: “Across 110th Street” en 2005 y “Viva La Tradición” de 2010.

Oscar Hernández ha dedicado los últimos tres lustros de su carrera artística a la SHO (Iniciales de Spanish Harlem Orchestra), en la que ha contado con la contribución de cantantes destacadísimos y afamados, dueños de un excelente recorrido musical como son: Rubén Blades, Frankie Vásquez, Herman Olivera, Ray De La Paz, Marco Bermúdez, Willie Torres y Carlos Cascante. En este periodo también ha realizado grabaciones con Nelson González, Luis Perico Ortiz, Gato Barbieri, Andrea Brachfeld, Tony Pastrana, Carlos Barbosa-Lima, Wilson “Chembo” Corniel, Ray Martínez, Marty Sheller, Gilberto “Pulpo” Colón, ‎Chico Álvarez y Luisito Quintero.

Bajo la extraordinaria dirección musical del maestro Óscar Hernández, han participado músicos de la talla de Jimmy Bosch, Rubén Rodríguez, Mitchel Frohman, Reynaldo Jorge, Bobby Allende, George Delgado y Pablo “chino” Núñez. El día 17 de marzo de año 2017, el maestro Oscar Hernández realizó una producción musical de Jazz, titulada “The Art of Latin Jazz”, para el sello Origin Records, un disco con diez temas realizado con un quinteto musical denominado “Alma Libre”, con el cual ha realizado diversas presentaciones.

sábado, 14 de marzo de 2020

LONG PLAY DE LA SEMANA: Introducing Tony Rojas



Tony Rojas  ‎– Introducing Tony Rojas
Sello: Rico Records ‎– MLP 702
Formato: Vinyl, LP, Album, Mono
País: US
Publicado: 1970
Género: Latin
Estilo: Salsa, Guaguancó

 Lista de Títulos

A1          El Sol Written-By – T. Rojas*
A2          Chemay              
A3          Cosas Del Alma
A4          El Mensaje        
A5          Tony´s Theme Written-By – T. Rojas*
B1           Lo Que Dicen Todas      
B2           El Bembe           
B3           Lo Que Traigo   
B4           Esto Se Acabo  
B5           Orbiting              

Créditos

Bass – Agustin Rodriguez, Gaby Sicardo
Bongos – Israel Morales, Milton Delgado
Congas – Joe Venero Jr
Cover – Errol Gershfeld
Cowbell – Israel Morales, Milton Delgado
Directed By – Tony Pabon
Engineer – V. Cartagena*
Leader – Tony Rojas (2)
Piano – Alfredo Dorsey
Producer – R Cartagena*
Timbales – Phil Velez
Trombone – Charles Stephens, Lou Barbarin


Fundada por George Goldner en 1965, esta disquera Latina comenzó a aprovechar el nuevo sonido de Boogaloo, pero de verdad que termina siendo mucho más TNT surge cuando Tito Ramos le dice a Johnny Colon que quiere tener su propia banda como muchos cantantes de la época se le dio la via libre, pues tubo serios inconvenientes con los músicos, con Colon como director y hasta consigo mismo, pues Tito quería hacer lo que quería el no ensayaba y según cuentan Tito se sentía que era una estrella que debia tener privilegios y su manejo debia ser como el de lavoe.

La TNT Band conformada por Tito Ramos y Tony Rojas es una Orquesta de una buena propuesta de musica salsa. Fueron la orquesta por excelencia a la par de Richie Ray & Bobbie Cruz y de la orquesta de pete Rodriguez, como referencia del movimiento boogalo latino.

su movimiento musical fue relativamente corto, pero en sus temas de salsa brava deja un parametro de identificación del buen momento de ritmos como el latin, el boogaloo, el son, las guariras adaptadas con trombones de baras y saxos, al estilo de johnny Colon y unas descargas
de timbal acompañados de unas excelentes letras.

Su canción más popular fue "La Meditación”. Tubo a lo largo de su historia cerca de 49 discos sencillos de 45 rpm 4 lps propios y 1 lp de coleccón de 1978 bajo el sello cotique

entre sus mejores temas se referencia.

"El Sol"
"El Sr. Galán"
"Borinquen Bella"


En 1969, Tito Ramos y tonny rojas nuevamente son el escandalo del sello cotique no sin antes disolver la Tnt y Tonny se lanza en solitario como voz lider independiente, con dos unicos albumes con los cuales toco casi con su orquesta original "tnt band", cuyos títulos fueron:

Tonny Rojas - Introdusing
Tonny Rojas- el chino divino

Tito Ramos en 1973 se convirtió a la Religión y se ordenó reverendo. dejo la Tnt pero colaboro a Tonny con algunos coros de su lp Introdusing.


MÚSICOS ORIGINALES DE LA ORQUESTA:

Steve Pullian - Trombon
Robert Lemus - Trombon
Freddy "Big Baba" Crespo - Timbales
Joe Venero - Congas
Al Dorsey - Piano
Joe Dreyfus - Bajo
Tito Ramos - coros y voz lider
Tony rojas - coros y voz líder

INFLUENCIA DE LA RELIGIÓN EN LA SALSA


Para hablar de los orígenes de la salsa, es muy amplio el espectro, tanto musical como cultural, que debemos atravesar, para llegar hasta sus raíces. El largo camino a recorrer en el tiempo, nos remonta hasta el siglo XIX, cuando diásporas de la cultura africana, se expandián por el mundo, gracias en parte al alto tráfico de esclavos durante la época.




Cuba, por su localización geográfica, se convirtió en un puerto con alta afluencia de colonizadores y por ende sus esclavos, siendo estos últimos los directos responsables de incubar una mezcla cultural, que algunos historiadores de música latina catalogarían como afrohispanoindigenas.

Esta mixtura, no solo nutriría aspectos de la cultura general, como la gastronomia y constumbres, también permearía de forma importante la religión y la musica, por eso es este el preciso punto de quiebre en donde nos detendremos para este texto, por cimentar una base solida y que se prolongaría durante la evolución de la salsa.

Gracias a que la religion venida desde Europa, se concentraba en convertir solo a los latifundios o a sus iguales, pasando por alto a sus esclavos, es que la cultura Africana se mantendría con vida, ya que estas minorias, gestarón en donde tuvierón la posibilidad, sus costumbres, para no dejarlas extinguir.

Es esta la razón por la cual en la isla, se instauraría con fuerza «La Santeria», un culto religioso, heredado de tradiciones culturales Yoruba y combinado con algo de catolicismo. Este tendría una importante influencia en la salsa, ya que sus ritos traicionales de evocación a deidades, se llevrían y se llevan a cabo, con ritmos musicales, combinados de fuertes percuciones y llamados vocales de quienes relizan el rito.

Grandes salseros, muchos años después del inicio del mestizaje cultural, rindieron homenajes, a las divinidades que se le cantaban siglos atrás, ejemplo de estos tributos son las siguientes interpretaciones.

BABALÚ AYÉ, Asociado con San Lazaro, es el Orisha de las enfermedades venéreas, las pestes y la miseria.

CHANGÓ, Asociado con Santa Barbara, es el rey guerrero de la religión Yoruba

OSHUM, Asociado con San Juan Bautista, es otro guerrero Osha, y es el encargado de proteger y vigilar, y Yemayá, es la madre de todos los hijos en la tierra.





ORISHAS, BAILE, Y INSTRUMENTOS MUSICALES


En la Santería se veneran los mismos dioses u orishas africanos - aunque incluye a Babalú Ayé o San Lázaro que no es una deidad yoruba sino dahomeyana -. Pero a diferencia de lo que ocurre en África, cada dios africano está también identificado por un santo católico al que se le reconocen atributos parecidos. Este hecho, que tuvo su origen en la intención del esclavo africano de enmascarar ante sus amos su devoción a los Orishas, condujo hacia el profundo proceso de sincretismo entre ambas religiones - una africana y la otra europea - que dio nacimiento a la Santería. Lo realmente asombroso fue que se mezclaron en la nueva religión cubana elementos filosóficos, formas de veneración, establecimientos de jerarquías y relaciones sociales que tenían sus antecedentes colocados indistintamente en los dos continentes señalados. Este hecho permitió que con el transcurrir del tiempo, tanto los descendientes de europeos como los de africanos - y la suma de ambos es la gran mayoría de la población de Cuba - pudieran cómodamente participar, si así lo querían, de esta religión.

Sin embargo las formas artísticas de la Santería, sobre todo la música y la danza unida a ella, preservaron los comportamientos y actitudes estéticas de los africanos. Por ejemplo a pesar de que es el idioma español el que se utiliza para la profesión del culto, los cantos utilizados en él se hacen aún hoy en lengua yoruba. Asimismo la música consiste del canto heterofónico de un solista que alterna con un coro bajo el principio estructural de “llamada” (solista) y “respuesta” (coro). El acompañamiento de estos cantos se realiza por diferentes conjuntos de tambores donde el concepto que guía y ordena toda la música es el rítmico. Aquí la armonía, que organiza por excelencia a la música europea, queda completamente fuera de la realización artística.


La danza se realiza por bailadores individuales, o grupos que forman diversas coreografías utilizando predominantemente las líneas y los círculos, también a la usanza africana. Queda totalmente excluido el baile de pareja enlazada al estilo europeo.En la Santería tradicionalmente se utilizan tres tipos de conjuntos instrumentales para también tres tipos de actividades diferentes: los tambores batá, para las ceremonias de mayor envergadura religiosa; los güiros o abgues, para actividades no tan importantes del culto y los tambores de bembé, hoy sustituidos por las tumbadoras cubanas o congas y empleados estos para las actividades profanas vinculadas a la religión.

El hecho de haber podido llegar la Santería como religión a muy diversos estratos de la población cubana, permitió que sus formas artísticas, de evidente antecedente africano, se transmitieran a individuos cuyas preferencias estéticas eran muy diferentes, pues se encontraban más cerca de las de los europeos. Este proceso de africanización que ocurre en Cuba - que por supuesto no queda geográficamente dentro del continente africano -, permitió la incorporación de comportamientos estéticos nacidos en África, a formulaciones artísticas netamente cubanas. En ello jugó un papel fundamental la Santería, aunque también ocurrió lo mismo con otras religiones afro-cubanas como la Regla de palo, de antecedente bantú.

Las formas artísticas de la Santería, sobre todo sus músicas y sus danzas, han nutrido y nutren aún hoy una buena parte de la música profesional de Cuba, tanto la conocida como música popular cubana, como la música clásica o de concierto creada en el país. No pocas actitudes y comportamientos estéticos que caracterizan hoy al individuo cubano nacieron en el marco de esta religión y muchos de sus símbolos de identidad han pasado también a constituirse en símbolos de identidad para el cubano en general.


GUAGUANCO Genero Musical


El Guaguancó es un ritmo que se originó en Cuba a raíz de la abolición de la esclavitud en la isla en 1886. El guaguancó representa una fusión de varios rituales profanos afro-cubanos conocidos como rumbas.




El guaguancó es un ritmo que se originó en Cuba a raíz de la abolición de la esclavitud en la isla en 1886. El guaguancó representa una fusión de varios rituales profanos afro-cubanos conocidos como rumbas. Las otras dos variedades importantes son el yambú y la columbia. Los bailadores del guaguancó se mueven al ritmo de los instrumentos de percusión rodeados de un coro dirigido por un solista, que realizan una coreografía altamente erótica. El hombre va en busca de la mujer con fuertes movimientos pélvicos muy expresivos. Ella a su vez, lo evade y rechaza, hasta finalmente someterse a sus avances. El acto final significando la conquista realizada se conoce como el ''vacunao''.

Muchos, si no la gran mayoría, de los guaguancós eran composiciones anónimas. Las más antiguas datan de finales de la era colonial española en la Isla y se conocen como "rumbas del tiempo de España". A pesar de sus ritmos netamente africanos, el guaguancó revela ciertas influencias españolas, especialmente en sus manifestaciones flamencas y de las décimas campesinas en los textos. Según Mongo Santamaría, uno de los intérpretes más conocidos de este género, el guaguancó surgió cuando los afro-cubanos intentaron cantar flamenco.

El guaguancó, por lo general con textos anónimos, es interpretado con tres tumbadoras y por un tipo de caja de madera percutida con palillos o con las manos, llamada cajón. A los percusionistas se les agrega un coro que responde a un solista. Los bailadores presentan una coreografía en la que el hombre persigue a la mujer con movimientos sumamente eróticos. Ella , aunque en un primer momento lo rechaza, al final lo consiente. Este acto, que representa la "conquista" del hombre a la mujer, recibe el nombre del vacunao.


Las composiciones más antiguas, denominadas "guaguancó del tiempo de España", se corresponden con el fin de la era colonial española en Cuba.

El guaguancó es fruto de un sincretismo de influencias africanas y españolas. Esta última presencia se nota sobre todo por el empleo de textos basados en décimas. A decir de Mongo Santamaría, célebre "rumbero", el guaguancó surgió cuando los afro-cubanos intentaron cantar flamenco.

BREVE HISTORIA DE LA SALSA EN LA ISLA DEL ENCANTO



El surgimiento de la salsa, a finales de la década de 1960, tomó por asalto los escenarios musicales en Puerto Rico y Nueva York. Se convirtió en la representación rítmica y narrativa de nuestra historia urbana moderna. Tanto a través de su sonido fuerte y agresivo como de sus letras, reclamó igualdad y libertad y clamó por un espacio propio para el gozo y el baile. 


Esta conjunción produjo textos que sirvieron para entender la historia de la nación puertorriqueña que transita continuamente en la amplia geografía entre Puerto Rico y Nueva York. Más allá de los márgenes de tensión y rudeza social que sus formas interpretativas trajeron a los escenarios, en su narrativa, la salsa dramatizó y resaltó las penurias que atravesaban los puertorriqueños pobres. Fueron ellos quienes, desde mediados del siglo pasado, formaron parte del circuito migratorio hacia la ciudad de Nueva York.

La gesta musical de esta nueva sonoridad, desde la perspectiva sociológica se inscribe en el movimiento contracultural que emergió en Estados Unidos a finales de los años 60 y que representó una nueva forma de ver la historia. Esta nueva perspectiva proponía el rompimiento con lo que se conoce a través de la cultura estadounidense como el “sueño americano”. De esta manera, lo que a principios de la década del 70 se comercializaba con el nombre de salsa, se convirtió en una manera de hacer música, que marcó la ruptura de una generación con las normas tradicionales y su reclamo de mayor reconocimiento social y de justicia.


La salsa, como forma musical, es el resultado de la evolución y combinación del son montuno cubano, la rumba, la bomba, la plena, así como de algunas tendencias armónicas de la tradición negra estadounidense que incluyen el jazz, el rhythm and blues, el funky y el soul. Los protagonistas de ese movimiento son principalmente músicos puertorriqueños que supieron articular nuevos patrones y alteraciones rítmicas progresivas. El resultado fue un sonido fresco que definía su colectividad. Lo hicieron desde la Isla y los barrios pobres de Nueva York con un canto novedoso y una cadencia y acento que la convierte en música bailable. Se fundamentó en las formas y estilos de la tradición popular afrocaribeña, pero con un nuevo swing. Por esta razón es que se ha constituido en una de las expresiones musicales que más definen la identidad caribeña del siglo XX.

En el mercado, la salsa se presentó como uno de los híbridos, mejor logrados, de la narración historiográfica y de la música popular caribeña. Como fórmula musical comercial, homogeneizó en un solo concepto, todas las innovaciones armónicas y melódicas labradas a finales de la década de los 60.

Antes de su surgimiento, la música del Caribe se reconocía por su diversidad. El son, el mambo, la pachanga, el cha cha chá, el guaguancó, la guaracha, la guajira, la plena y la bomba conservaban sus rasgos sonoros y tenían una identidad definida en su expresión bailable. De la misma manera, la industria discográfica respetaba la distinción de estos ritmos y procuraba mantener la rúbrica de sus sonidos en sus producciones, sin alterar sus fórmulas. En aquel momento era importante salvar las particularidades de lo latino y caribeño frente al contexto del mundo musical anglosajón.

Con la llegada de la salsa, la historia cambió. Este género que tuvo su primer y mayor impulso desde la ciudad de Nueva York, se consolidó como tal, apoyado en los agresivos esfuerzos de mercadeo de la empresa discográfica Fania. Dirigida por el judío Jerry Masucci y el dominicano Johnny Pacheco, la nueva constelación de artistas -en su mayoría puertorriqueños, y caribeños – se posicionó con éxito en el mercado musical.

En la lista de esas grandes figuras están, entre otros, Ray Barretto, Willie Colón, Bobby Valentín, Héctor Lavoe, Ismael Miranda, Pete “El Conde” Rodríguez, Adalberto Santiago, Eddie Palmieri y Larry Harlow. También están Richie Ray, Bobby Cruz, Celia Cruz, La Lupe, Cheo Feliciano y Rubén Blades. Al grupo se suman otras leyendas salseras que, establecidas en Puerto Rico, realizaron una de las contribuciones más importantes al desarrollo del género, como: Ismael ” Maelo” Rivera, Rafael Ithier, Tommy Olivencia, Willie Rosario, Andy Montañez, Raphy Leavitt, Elias Lopés y Roberto Roena.

La historia de la salsa no estaría completa sin consignarle una mención especial al trabajo realizado en Puerto Rico desde la década del 1950 por Rafael Cortijo y su Combo. El mismo está inscrito en los fundamentos que originaron este movimiento. El estilo de Cortijo y su Combo, con la participación vocal de Ismael Rivera, revolucionó la música del Caribe. El nuevo ritmo tomó como base la evolución de la tradicional música de bomba y plena puertorriqueña con arreglos musicales trabajados en gran parte por el trompetista Quito Vélez. Aunque éstos no eran muy elaborados, con su sonoridad devolvió a la percusión el predominio que había perdido en la industria musical debido a la fuerza de las grandes agrupaciones estilizadas.

Cortijo y su Combo desarrollaron, a mediados del siglo pasado, sin el apoyo de las poderosas disqueras, la aportación más importante en el pentagrama antillano. Su fórmula, diferente a la utilizada por las famosas big bands latinas del mundo neoyorquino, tuvo entre sus principales exponentes a Tito Puente, Frank “Machito” Grillo y Tito Rodríguez.

Para entender la historia de la salsa es esencial evocar a todo el grupo de músicos y cantantes que la interpretaron. Todos fueron protagonistas de un nuevo capítulo de la narración musical en el Caribe y enarbolaron los signos que definieron nuestra nueva identidad sonora y social.

Autor: Hiram Guadalupe Pérez

sábado, 7 de marzo de 2020

LONG PLAY DE LA SEMANA: Celia Cruz ‎– Son Con Guaguancó


Celia Cruz ‎– Son Con Guaguancó
Sello: Tico Records ‎– SLP-1143
Formato: Vinyl, LP, Album
País: US
Publicado: 1966
Género: Latin
Estilo: Guaguancó, Cha-Cha, Bolero, Mambo

Lista de Títulos

A1          Bemba Colora  
A2          Son Con Guaguanco     
A3          Es La Humanidad            
A4          Lo Mismo Si Que No     
A5          Oye Mi Consejo              
A6          Se Me Perdió La Cartera             
B1           Tremendo Guaguanco 
B2           Permíteme       
B3           No Hay Manteca            
B4           El Cohete           
B5           La Adivinanza   
B6           Amarra La Yegua

Créditos

Arranged By – Bobby Valentin, Charlie Palmieri, Louie Ramirez, Tito Puente
Producer – Al Santiago

No siempre los grandes artistas escogen el momento adecuado para lanzar sus carreras en solitario. En 1966, Celia Cruz, quien venía de la cima de la fama con la Sonora Matancera y de iniciar una relación artística con Tito Puente, fue tentada por Tico Records para iniciar esa carrera, y ella aceptó a ver que pasaba. Así surgió esta grabación que fue titulada Son con Guaguancó, porque se centraba en ambos ritmos. Finalmente, el proyecto en solitario no fructificaría allí y tendría que esperar. Celia siguió con Tito Puente. Pero lo que si logró fue potenciar aún más su nombre.

Regresamos a FM: VUELVE LA BEMBA COLORA