lunes, 28 de marzo de 2022

Pibo Márquez, La Colombiana Orquesta – Quiero Saber De Ti (5to Aniversario)


El percusionista, arreglista y productor venezolano Joel “Pibo” Márquez presenta su más reciente sencillo titulado Quiero Saber de ti, después de sus dos últimos sencillos Muchacho Barrigón y Manos Candela, con la participación del Luis Cabrera en la parte vocal, para este principio de año uno de los mejores temas que han aparecido, este nuevo sencillo emplea sonidos característico en los arreglos del propio Márquez, la presencia de nueva cuenta de La Colombiana orquesta orienta en su línea musical desde hace cinco años al propio Márquez, el tema en cuestión es presentado de manera agresiva desde el inicio, para este nuevo material que está cocinando, se presentaran con “Pibo” Márquez personalidades como: Ray Bayona, Marcial Isturiz, Richie Valdez, Eliazar Medina, Luis Cabrera para cinco temas de los cuales contendrá esta producción en su quinto aniversario, Cinco de cinco y cinco estrellas le damos también nosotros por tan poderoso material próximo a salir.
 
Para “Pibo” y su afán por difundir la musicalidad de lo “Afro” en Latinoamérica ha desarrollado está temática como productor de programas de radio y de Tv, así como en documentales. Todos los años lleva a cabo el Festival Internacional de Percusión en Barlovento (región de la costa central venezolana) donde se dan cita músicos de renombre mundial para aportar sus conocimientos a las comunidades de esa región. Con regularidad “Pibo” imparte talleres y cursos de percusión en Venezuela, Colombia y en México en años pasados.
 
Ha participado en proyectos de grabación y colaboraciones en vivo para artistas como: Alfredo De La Fe, Arturo Sandoval, David Valentin, Dominic Miller, Cheick Tidiani Seck, Orquesta Filarmónica de Bogotá, Chico Freeman, Naty y su Orquesta, Juanes, Guayacán Orquesta, Los de Debajo de México, Aterciopelados, entre muchos otros.
 
Músicos: Joel “Pibo” Márquez – percusión, Edgar Dolor, Jaime Hernández, Jhon Gómez, Joel Pibo Márquez – coros; Cristian Salcedo – piano; Ricardo Puche – bajo; Álvaro Gómez – Trombón; Luis Cabrera – vocal.

UN TESORO DE LA MÚSICA VENEZOLANA:


Frank y sus Inquietos es un tesoro venezolano poco comentado en nuestro tiempo, una joya asombrosa, casi desconocida de la salsa dura venezolana, atesorada con celo por los melómanos de todos los tiempos. Este grupo es evidencia de la comunión musical de la joven Caracas de finales de los sesenta con los sonidos del Caribe en su incipiente matrimonio con la agresividad urbana. A raíz de estos encuentros de “amigos que tocaban instrumentos” como congas, bongos, piano, timbales y sus feroces descargas en el último piso del Bloque 3 de La Silsa, edificio ubicado en esta humilde y populosa zona popular de Caracas, el repertorio de canciones del homónimo Frank y sus Inquietos (1969), con una imaginación exquisita y rebosante de vitalidad, voces y coros auténticos, percusión arrolladora, bajo contundente y piano feroz dirigido por Frank González.
 
Fidias Danilo Escalona, padrino de la salsa, en cuyo programa radial “La hora de la salsa” pasaron como invitados Frank y sus Inquietos dijo una vez que “cuando las cosas se hacen con inmenso cariño y llevan el mensaje que la música latina contiene en sí mismas, Suelen hacerse bien”, sin duda, ese disco de Frank lo cumplió con creces. Gracias a su paso por la radio en el programa Escalona, Frank y sus Inquietos también fueron invitados por Gilberto Correa a su programa de televisión “Ritmo y Juventud” donde comienzan a tocar todos los domingos. El impacto de Frank y su Restless fue tan positivo que se convirtieron en invitados habituales en diversas celebraciones por toda la ciudad. Posteriormente, Frank decidiría continuar en otro proyecto musical, esta vez familiar, mientras que el disco con los Inquietos nunca volvería a editarse, hasta ahora.
 
Lo que podemos describir como obra maestra del “guaguancó agresivo”, es un monumento que hoy está prácticamente inmaculado como una playa virgen, que clama por su redescubrimiento y que se construye con cada escucha, ritmo arrollador, arreglos de creatividad arrolladora, con Sonidos y voces distintivos, crudos y directos extraídos de la vida misma, de tomar el pulso de la lucha por la vida en la jungla de asfalto.
 
Temas: 1. La Ley de la Vida; 2. Mi Primer Amor; 3. Rumba de Salón; 4. Mira Hacia el Presente; 5. Resígnate; 6. La Descarga de Frank; 7. Tengo Felicidad; 8. El Boricua; 9. Rumba Pa el Solar; 10. Que Seas Así; 11. Tu Orgullo; 12. Mensaje de Paz.
 
Músicos: Vocal – Miguel Marcano; Vocal – Tomás Toca; Coro – Alexis Diaz; Conga – Oswaldo Velázquez; Bongo – Jose Ovalles; Bajo – Luis Diaz; Timbales / Director Musical – Efraín González; Piano / Director – Frank González.

Timbalito Street – Quiéreme


Timbalito Street es un cuarteto de Música Cubana fundado en el año 2011 por Lino Díaz, pianista y tresero cubano. Junto a Lupe Amador, también cubana, en la voz y percusión menor, crearon un proyecto propio, interpretando los clásicos del cancionero popular cubano con salpicaduras de Jazz, género preferido y bien sincretizado con la música latina.
 
Posterior a su primer sencillo titulado Tú Que Me Conoces, Timbalito Street regresa con un nuevo sencillo musical que lleva como título Quiéreme. Banda altamente recomendada.
 
En Cuba la historia de los cuartetos se remonta a la década de 1940, aunque hay ciertas dudas sobre la fecha exacta. Llegaron a existir muchos cuartetos que se pusieron de moda y que fueron programados en los grandes espectáculos de televisión, teatro y el cabaret. Esos cuartetos fueron como escuelitas de voces nuevas que eran preparadas por pianistas, repertoristas, y maestros de canto. Recordemos que de Las D´Aida salieron Elena Burke, Moraima Secada, Omara y Haydée Portuondo. Muchas de estas voces ya habían pasado por otros cuartetos de valor, entre los que destacan el de Facundo Rivero, y el de Orlando de la Rosa.
 
Músicos: Lino Díaz, director, piano, tres cubano, coros; Lupe Amador, voz principal, bongó, maracas; Fernando Wilhelmi, flautas, saxos, güiro, coros.

Paulito FG – Sigue Cantando Celina

 
Cursó estudios de clarinete en el Conservatorio de música Ignacio Cervantes. Comenzó su carrera en solitario con su propia banda en el año 1992, pero anteriormente había sido integrante de las agrupaciones Adalberto Álvarez y su Son, Dan Den y Opus 13. Desde esta temprana etapa empezó a destacar por la musicalidad de su voz, su estilo alegre a la vez que cuidado y sus dotes musicales. Temas como “Siempre Hay un Ojo que te Ve” y “El Humo o la Vida” estuvieron en las listas de preferencia de los que empezaban a ver ya en Paulo FG una figura imprescindible del panorama musical cubano.
 
Paulito se refiere a Celina, como ¡Toda una mística inspiración! donde redescubro la humilde grandeza del arte en el encanto natural que nos muestra su obra. Le conocí en los inicios de mi carrera, cuando era ya “La reina de la música campesina”, sentí su afecto y estima en cada encuentro, más esa mística que le acompañaba hasta llamarla cariñosamente como muchos… madrina.
 
Extrañé hace algunos años el sonido de su voz, tras su ausencia física, y como el atrevido escultor que talla con su estilo personal una imagen que ya Dios predestinó al éxito, me dejé llevar por el recuerdo de sus versos y estribillos, siempre alegres y moldeados al entorno musical más criollo de su tiempo, algo que me impulsó a reverenciar con este disco su hermosa trayectoria artística.
 
Con esa mezcla de gratitud y admiración hacia su legado en esta producción fonográfica le regalo al público versiones de algunos temas que escogí de su reconocido repertorio, cuidando el diseño original de los mismos en sus estructuras básicas, pero en esta ocasión aportando una mayor dimensión instrumental que se combina con otras preferencias y esquemas sonoros, para magnificar cada tema, sin comprometer de su contenido más genuino, el sabor natural y la simpática expresividad de sus líneas originales, elementos que resaltan por encima de todo el valor de su música.
 
Temas: 

1. Cantando Celina
2. El Punto Cubano
3. Santa Bárbara
4. Oye mi leloley
5. Pedacito de mi vida
6. Mi tierra es así
7. El encanto de tu boca
8. El reto
9. Camina y ven
10. Flores para tu altar

DIEZ HITOS Y CURIOSIDADES DISCOGRÁFICAS DE CODISCOS

 

En la celebración del centenario del natalicio de Alfredo Díez, recordamos algunos hitos y curiosidades de su inconmensurable catálogo.


El 21 de marzo de 1922 nació en Medellín Alfredo Díez Montoya, quien 28 años más tarde fundó Zeida, una de las empresas que apuntalaron la industria discográfica colombiana en la década de los cincuenta. De ese afortunado suceso han pasado más de 7 décadas en las que Codiscos –como se llamó desde mediados de los cincuenta la sociedad comercial que acogió a Zeida y otros sellos aledaños como Costeño y Famoso- se ha convertido en pieza sustancial de la banda sonora colombiana.
 
En la celebración del centenario del natalicio de Alfredo Díez, recordamos algunos hitos y curiosidades de su inconmensurable catálogo.
 
El primer disco prensado
 
La música guasca o carrilera, como se le llamó a la música campesina antioqueña, se hizo muy popular entre las décadas de los 30 y los 40. Influenciada por el cine y la música mexicana –así como por el tango y los pasillos ecuatorianos- esta práctica musical de carácter nostálgico y tremendista fue la protagonista del primer disco local publicado por Zeida. Se trató de un sencillo a 78 RPM firmado por Los Hermanos Gutiérrez, una pequeña estudiantina conformada por Luis Eduardo, Manuel Antonio y Carlos Emilio, tres mecánicos que en 1944 se instalaron en el barrio Corazón de Jesús en Medellín.



 
La eterna orquídea
 
Antes de fundar Codiscos, Alfredo Diez Montoya y sus hermanos –Alberto y Horacio- hicieron parte de Discos Silver en sociedad con los hermanos Julio y José Ramírez Johns, este último, padre de Margoth Ramírez, con quien Alfredo contrajo nupcias el 7 de julio de 1944. En Sorrento, la finca de su suegro, ubicada en El Poblado, el naciente empresario se enamoró de una de las catleyas que José coleccionaba primorosamente. Meses después de los primeros prensajes de Zeida, la orquídea empezó a aparecer en las etiquetas de los discos, convirtiéndose en el símbolo distintivo de la compañía.



 
Las primeras portadas a color
 
A mediados de la década de los cincuenta, la empresa fundada por Alfredo Díez pasó a llamarse Codiscos, quedando Zeida como un sello enfocado en la música popular. Una de las innovaciones más notables de aquellos días fue que sustituyeron las fundas de papel estraza –en las que habitualmente se empacaban los discos-por planchas de cartón cuadradas ilustradas a todo color. De esa primera serie –que contenía discos de 10 pulgadas- alcanzaron a editarse, al menos, 20 títulos que abarcaban producciones de El Dueto de Antaño, Lucho Bermúdez, Espinosa y Bedoya, Trío Emilio Murillo, Trío Grancolombiano y Edmundo Arias, ente otras referencias muy apetecidas en el mundo del coleccionismo. Muchas de las portadas de estilo modernista que acompañan estas grabaciones están firmadas por Agres, una mujer o un hombre cuya biografía permanece en el más absoluto misterio.



El Morocho del Abasto
 
En 1957, Codiscos se había posicionado como una de las empresas más reconocidas del ámbito discográfico latinoamericano. Una de sus estrategias fue prensar y distribuir sellos como Capitol Records, EMI, Warner y Odeón. Esta última tenía en su repertorio la música de Carlos Gardel a quien Codiscos le rindió tributo, 22 años después de su trágico accidente, con la instalación de una placa conmemorativa en el aeropuerto Olaya Herrera y la publicación de una colección de nueve álbumes.



 ¿El primer rock ‘n’ roll colombiano grabado?
 
Los vestigios fonográficos más antiguos de rock hecho en Colombia fueron grabados a finales de la década de los cincuenta. Uno de ellos es la insólita “Okey baby” (Discos Fuentes, 0591) de Carlos Román y su Sonora Vallenata, probablemente editada en 1958. En abril de ese mismo año apareció el debut de Los Teen Agers, registrado en el estudio de Codiscos ubicado en el centro de la capital de Antioquia entre las calles Junín y Ayacucho. Dentro de la variedad sonora del disco - mambo, baión, danzón, fox, vals y blues- se destaca “Gran ritmo”, un cándido remedo de Bill Haley. Firmada por un tal Otto Gunval –que no es otro que Octavio González, acordeonista original del cuarteto- la canción es un bocado delicioso por su ritmo destartalado, el diálogo ingenuo entre guitarra y acordeón de teclado, el desvergonzado inglés macarrónico y un inesperado solo de batería interpretado con gracia jazzera por Luis Fernando Jaramillo.
 

Las escobas que cantan
 
Guillermo Díez Ramírez, el segundo hijo de Alfredo y Margoth, escuchó a The Beatles durante su temporada de estudios en Estados Unidos. Fue él quien impulsó la licencia y posterior publicación en Colombia de ‘Meet the Beatles’, el segundo álbum oficial del cuarteto de Liverpool, a cuyo título le agregaron un curioso apellido: “Las escobas que cantan”. Fue el primero de una serie muy codiciada que comprende 15 álbumes y 10 “compactos”, como se les conoció en su momento a los discos publicados en pastas de 7 pulgadas que giraban a 33 RPM y que contenían dos canciones por cada lado.


 
Costeño, el sello de la palmera
 
En 1968, al mismo tiempo que se llevó a cabo la primera edición del Festival de la Leyenda Vallenata, nació Costeño, filial de Codiscos que le dio un giro trascendental a la historia de la música de acordeón. En el libro ‘MTM Entre la tradición y la innovación. Historia cultural de una compañía discográfica’ (2018), Humberto Moreno, uno de los creadores de la marca, le contó al sociólogo David García las razones de su empeño: «Desde los años cincuenta, sobre todo en Barranquilla, a todo el vallenato que tenía acordeón lo llamaban “música corroncha”, y ese término tenía cierto aire despectivo por el origen campesino de la música. Pero yo ya en esa época creía, y sigo creyendo, que se trata de una música valiosa en términos musicales, pero también sociológicos, por eso quisimos promoverla; además, vimos allí una buena oportunidad comercial, una franja de mercado que valía la pena desarrollar».
 
Enrique Díaz, Calixto Ochoa, Luis Enrique Martínez, Alfredo Gutiérrez, Aniceto Molina, Emilio Oviedo, Adolfo Pacheco, Silvio Brito, Otto Serge, Los Diablitos, El Binomio de Oro, Náfer Durán –con quien debutó Diomedes Díaz en 1976-, Daniel Celedón, Los Gigantes del Vallenato, Los Betos, Iván Villazón y Peter Manjarrés fueron apadrinados por un sello cuyo logo distintivo –la palmera amarilla sobre el fondo verde- fue creado por Olga Walter, responsable, también, de cientos de portadas publicadas por Codiscos en los setenta.



 
Mujeres vallenateras
 
Con la publicación de ‘La reina del vallenato’ en 1972 –disco grabado por la cantante Cecilia Mesa y la acordeonera Rita Fernández-, Costeño abrió puertas que durante años estuvieron cerradas en el escenario patriarcal de la música de acordeón. Entre los ochenta y buena parte de los noventa, Codiscos promovió el trabajo de cantantes, acordeoneras y compositoras. Entre ellas se destacan Kissy Calderón, Graciela Ceballos y, especialmente, Patricia Teherán, quien escribió su leyenda –antes de morir trágicamente el 19 de enero de 1995- con tres discos registrados junto a Las Musas del Vallenato y el inmortal ‘Con aroma de mujer’, publicado en 1994 en compañía de Las Diosas del Vallenato.



 
Los Canticuentos
 
La cantante, compositora y periodista chilena Marlore Anwandter se instaló en Bogotá en 1973. Durante aquellos años en los que viajó por toda Colombia, compuso un puñado de canciones que, tiempo después, se convertirían en patrimonio de los hogares colombianos y en uno de los hitos discográficos de Codiscos. Durante una temporada que pasó en Estados Unidos las grabó caseramente y luego le envió el casete al sello. Álvaro Arango, gerente, y Rafael Mejía, director artístico, aceptaron el proyecto y en 1975, junto a un coro de niñas y niños, grabaron el primero de cinco discos que fueron publicados, sucesivamente, entre 1980 y 1985.



El disco del año
 
Respecto a este emblemático compendio decembrino, cuenta Humberto Moreno: «Yo viajaba a todas las zonas del país para recoger información de primera mano. Luego, en Medellín, presentamos una preselección y, junto a Guillermo y Álvaro Arango, definíamos el repertorio final. El primer volumen de la serie ‘El Disco del Año’ salió en 1969, justo en el momento en el que se había fortalecido nuestro repertorio de música tropical bailable».
 
Surcaron las hendiduras de aquel “variado” legendario Los Graduados, Alfredo Gutiérrez y Los Caporales del Magdalena, Los Hermanos Martelo, Los Claves, Los Ejecutivos y Los Telestrellitas.



martes, 15 de marzo de 2022

UN DIA COMO HOY: Edgardo Morales - Timbalero

 

#UndiaComoHoy conmemora el natalicio del Timbalero, Edgardo Morales, quién nación en Ponce (Puerto Rico) un 15 de Marzo del 1955,  fue considerado por la crítica salsera de su país como un orgullo nacional, por sus interpretaciones excelsas de timbal, dentro de su amplia carrera musical, desfiló por la Universidad de la Salsa, La más Sureña, seudónimos como se les conoce a el Gran Cobo de Puerto Rico y la Sonora Ponceña, la Primerísima de Ángel Thomas Olivencia Pagan, El bajo Danzante del Bobby Valentín, José Alberto El Canario entre otras  
Edgardo Paleco Morales, que nos dejó una de las interpretaciones más representativas y de grata recordación para los amantes de la música afrolatina, se distingue el “Timbalero del Gran Combo de Puerto Rico, debutó a la edad de 15 años con la orquesta de Quique Luca en el año 1969 y el año 1976 grabo en el Álbum “Afuera” con el maestro Bobby Valentín.  Con el gran Combo estuvo desde el año 1979 hasta el 1988.
El maestro Rafael Ithier comentó a cerca de Edgardo Morales: "hicimos ese número para él, cuando lo vi por primera vez tocando reconocí que ese muchachito como percusionista era una maravilla, el tema se tocó por primera vez en el Club Caborrojeño, en Guaynabo, y fue un éxito total, tanto es así, que a mi juicio es el número más sonado por El Gran Combo de Puerto Rico”.
 “El Timbalero Del Pueblo” como también se le conocía a Edgardo Morales, realizó un único álbum como solista con la producción de Julito Alvarado, el cual fue titulado “El Hombre Del Timbal” publicado en el año 1992 por el Sello Sierra Records, un álbum con las voces de Chamy Solano y Salvi Solís, los arreglos de Ricky Rodríguez y en la producción Rubén Sierra, el disco contiene ocho temas, entre los cuales está el tema que da el nombre al álbum.
El timbalero ponceño Edgardo Paleco Morales participó en al menos, medio centenar de grabaciones, todo esto sumado a sus presentaciones en conciertos con diversas agrupaciones en muchísimos lugares del mundo, en especial con la Sonora Ponceña y El Gran Combo.
Edgardo Paleco Morales se nos fue muy joven a la edad de 58 años, el 19 del mes de marzo del año 2013 en Houston, Texas donde residía, después de luchar por mucho tiempo con una enfermedad incurable, cáncer de colon.

lunes, 14 de marzo de 2022

Dislocados – La Campana

 
Presentando su más reciente sencillo musical La Campana con invitados como Jimmy Bosch y Nelson Gonzalez. Dislocados el primer grupo de música ucraniano en presentar música latinoamericana a los ucranianos, ganador de los Independent Music Awards. Detrás de los músicos Dislocados hay cientos de conciertos en diferentes partes de Europa, Asia y África, escuchados por América. La banda Dislocados es la decoración de los mejores festivales de música, porque el desafío de sus ritmos incendiarios es aceptado por los mejores salseros del mundo y la letra de sus canciones no ha salido de los labios desde hace muchos años. Las canciones de la banda son obras maestras grabadas con los mejores músicos del mundo.
 
La banda fue fundada en 2005 bajo la dirección de Ilya Yeresk, uno de los pianistas y compositores más exitosos de Ucrania. Entre los 12 miembros de la banda también se encuentra Denis Adu, elegido como el mejor músico de jazz de Ucrania en el Dodj Competition 2009.
 
Dislocados se traduce literalmente como «loco», lo que enfatiza la naturaleza loca de la banda y la idea de que el país de nacimiento de los músicos no dicta su dirección musical y experiencia. El 10 de febrero de 2008, DISLOCADOS debutó mundialmente como la primera banda internacional Hard Salsa en aparecer en Hard Salsa Radio y WHUT 91.9 FM en Nueva York con su canción «Resaca».
 
Ganando popularidad en América y Europa Occidental, DISLOCADOS lanzó el álbum «La Salida», el primer álbum de salsa en Ucrania, cuya anotación fue escrita por el legendario músico de salsa Andy Harlow. Desde el lanzamiento de La Salida, DISLOCADOS ha recibido un gran reconocimiento internacional y elogios de músicos destacados como Jimmy Bosch y Andy Harlow.
 
El reconocimiento internacional de la banda Dislocados es una herramienta con la que intentan promover el estilo musical de Hard Salsa en Ucrania para incluir a su país en la lista de los máximos aspirantes a la atención mundial en este género.
 
Músicos: Ilya Yeresko – líder de la banda, piano, compositora; Karolina Patocki – voz principal, letras; Olesya Zdorovetskaya – voz principal, guiro; Anabel Chupryna – voz; Andrew Seagull – timbales, coro; Sergey Klyuyenko – bajo; Alexander Ivlev – congas; Arseniy Yandyuk – bongos; Dennis Adu – trompeta; Alexander Charkin – trombón.

Regresamos a FM: VUELVE LA BEMBA COLORA